En octubre se conmemoran tres fechas importantes relacionadas con la salud femenina. En la postemenopausia hay algunos factores de riesgo relacionados con el cáncer de mama y la osteoporosis. Sigue leyendo.
Por Redacción HEP
La lucha contra el cáncer de mama, la menopausia y la osteoporosis no son cuestiones aisladas. Para las mujeres mayores de 60 años, estos problemas de salud están interconectados, y la falta de atención a uno puede influir en la progresión de los otros.
El envejecimiento saludable debe incluir un enfoque integral que abarque no solo la prevención y el tratamiento de enfermedades, sino también la promoción del bienestar emocional, la actividad física y el acceso a una atención médica de calidad.
En México, el acceso a los servicios de salud sigue siendo desigual, afectando desproporcionadamente a las mujeres mayores de 60 años, muchas de las cuales no cuentan con una red de apoyo sólida ni los recursos económicos necesarios
Este mes de octubre representa un momento clave para resaltar la importancia de la salud femenina.
Tres fechas significativas se entrelazan este mes: el Día Internacional de la Lucha contra el Cáncer de Mama (19 de octubre), el Día Internacional de la Menopausia (18 de octubre) y el Día Mundial de la Osteoporosis (20 de octubre).
Estos días no solo visibilizan aspectos individuales de la salud, sino que, al observarlos en conjunto, nos permiten reflexionar sobre el bienestar integral de las mujeres mayores de 60 años, un grupo que enfrenta desafíos específicos pero muchas veces invisibilizados.
Cáncer de Mama: Un Desafío Latente
El cáncer de mama es una de las principales causas de muerte por cáncer entre mujeres en México y el mundo. Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en 2022, se registraron 23,790 casos nuevos de cáncer de mama y la incidencia nacional fue de 27.64 casos por cada 100 mil habitantes.
Este tipo de cáncer afecta principalmente a las mujeres, con una incidencia de 51.92 casos por cada 100 mil mujeres, mientras que en hombres la tasa es de 1.25 casos por cada 100 mil hombres.
La edad promedio en el momento del diagnóstico de cáncer de mama es de 62 años. Esto significa que la mitad de las mujeres que desarrollaron cáncer de mama tienen 62 años o menos cuando reciben el diagnóstico
La detección temprana sigue siendo la mejor estrategia para mejorar las tasas de supervivencia; sin embargo, en México, la cobertura de mastografías en mujeres mayores sigue siendo limitada, especialmente en áreas rurales.
A pesar de estos desafíos, la promoción de la autoexploración, el acceso a pruebas de detección y los avances en tratamientos han mejorado las tasas de supervivencia.
Menopausia: Más Allá de la Transición
La menopausia es otro tema que impacta significativamente la salud femenina. Este proceso biológico, que marca el fin de la capacidad reproductiva, generalmente ocurre entre los 45 y 55 años, pero sus efectos pueden extenderse por décadas.
La postmenopausia es la etapa posterior a la menopausia, la tercera del climaterio. Es una etapa larga que puede durar entre 10 y 15 años, desde los 51 años hasta los 65, de acuerdo con el Instituto de la Menopausia.
En la década de los 60 años, muchas mujeres aún enfrentan síntomas persistentes como sofocos, insomnio y cambios emocionales, lo que afecta su calidad de vida.
Además de los síntomas inmediatos, la menopausia incrementa el riesgo de desarrollar enfermedades crónicas, como la osteoporosis y enfermedades cardiovasculares, debido a la disminución de los niveles de estrógenos.
Por lo tanto, es crucial promover una atención integral que incluya educación sobre la menopausia y el acceso a tratamientos hormonales o terapias alternativas cuando sea necesario.
Osteoporosis: El Riesgo Silencioso
La osteoporosis es una enfermedad que afecta a una gran proporción de mujeres mayores de 60 años, caracterizada por la pérdida de masa ósea y el consecuente aumento en el riesgo de fracturas.
De acuerdo con un informe de Cleveland Clinic, las mujeres de más que 50 años tienen mayor riesgo de contraer osteoporosis. De hecho, las mujeres tienen cuatro veces más probabilidad de contraer osteoporosis que los hombres.
Según la Fundación Internacional de Osteoporosis (IOF), aproximadamente 1 de cada 3 mujeres mayores de 50 años sufrirá una fractura osteoporótica en su vida. En México, la osteoporosis afecta al 16% de las mujeres mayores de 50 años, con un riesgo particularmente alto en las que ya han pasado por la menopausia.
El impacto de la osteoporosis en las mujeres mayores es devastador. Las fracturas de cadera, en particular, están asociadas con una alta mortalidad y una reducción significativa en la calidad de vida.
La pérdida de masa ósea ocurre más tempranamente en las mujeres y experimenta una aceleración al cesar la producción estrogénica. Inicialmente el ritmo de pérdida aumenta en la perimenopausia y en los primeros años después de la menopausia,
Sin embargo, con medidas preventivas como la suplementación de calcio, la vitamina D, y el ejercicio regular, es posible mitigar los efectos de esta enfermedad. Además, la densitometría ósea es una herramienta crucial para la detección temprana, pero su acceso sigue siendo limitado para muchas mujeres mexicanas.
Un Enfoque Integrado para el Cuidado de la Salud
Octubre, el mes de la salud femenina, es una oportunidad para generar conciencia sobre los retos específicos que enfrentan las mujeres en su camino hacia un envejecimiento saludable.
Abordar de manera integral problemas como el cáncer de mama, la menopausia y la osteoporosis no solo mejorará la calidad de vida de estas mujeres, sino que también contribuirá a construir una sociedad más equitativa y saludable.
La promoción de campañas de detección, la educación sobre la menopausia, cáncer de mama y osteoporosis, así como el acceso a tratamientos preventivos son esenciales para garantizar que cada mujer mayor de 60 años en México tenga la oportunidad de envejecer con dignidad y salud.